Malvinas: 1829 - 1833 - 1982 - 2014 ¡Irrenunciables!
La Nación Argentina recuerda la fecha de la creación, en
1829, de la "Comandancia Política y Militar de las Islas Malvinas y las
adyacentes al Cabo de Hornos en el Mar Atlántico", por Decreto del
Gobernador Interino de la Provincia de Buenos Aires, Brigadier General Martín
Rodríguez.
Desde sus orígenes como nación independiente, la República
Argentina exteriorizó a través de actos de gobierno, el ejercicio efectivo de
su soberanía sobre los territorios australes y espacios marítimos heredados de
España.
El Gobierno argentino no dejó de reafirmar sus legítimos
títulos sobre las islas y buscó asegurar el respeto de las leyes para la mejor
protección de las actividades de la población argentina y de otros países que
residía en ellas. Se creó así el marco institucional apropiado para el
desarrollo de empresa colonizadora impulsada por el gobernador de las Islas
Malvinas, Luis Vernet.
Este efectivo ejercicio de la soberanía fue interrumpido el
3 de enero de 1833 cuando fuerzas británicas ocuparon las Islas Malvinas,
expulsando a la población y autoridades argentinas allí establecidas, y
reemplazándolas por súbditos británicos.
El pueblo y el Gobierno argentinos nunca consintieron dicho
acto de fuerza y ratifican hoy el mandato histórico, consagrado en la
Disposición Transitoria Primera de la Constitución Nacional, de su permanente e
irrenunciable determinación de recuperar por la vía pacífica de las
negociaciones diplomáticas el ejercicio pleno de la soberanía sobre las Islas
Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos
circundantes. Este objetivo constituye una política de Estado y responde a un
anhelo colectivo del pueblo de la Nación Argentina.
La reivindicación argentina sobre dichos territorios y
espacios marítimos australes es respaldada por los países de nuestra región.
Asimismo, diversos organismos y foros internacionales, entre los que se
destacan la Organización de las Naciones Unidas; la Organización de los Estados
Americanos; las Cumbres Iberoamericanas; y otras reconocen la existencia de la
disputa de soberanía e instan a ambas partes a reanudar el proceso negociador.